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La vivienda continúa siendo una de las principales preocupaciones de los españoles, con precios al alza, escasez de oferta y el temor a una nueva burbuja. El economista y doctor en psicología económica Vicenç Hernández Reche advierte que España se dirige hacia otra burbuja inmobiliaria, aunque distinta a la de 2008: la demanda es estructural y la financiación más prudente, pero la oferta limitada mantiene una presión sostenida sobre los precios.

Para 2025, prevé una subida de precios del 4% al 6% y unas 750.000 compraventas, aunque con signos de desaceleración a final de año. En 2026, los precios seguirán creciendo de forma más moderada, con un mercado tensionado por la falta de vivienda nueva y alquileres al alza. Entre los riesgos destacan posibles subidas de tipos del BCE, costes de construcción elevados y lentitud administrativa.

El experto identifica problemas estructurales: déficit de oferta (solo 80.000-100.000 viviendas nuevas frente a una demanda de 200.000), falta de vivienda asequible, exceso de burocracia urbanística y escasa rehabilitación energética (más del 50% del parque supera los 40 años). Propone agilizar licencias, incentivar el alquiler asequible y fomentar la rehabilitación.

Critica la Ley de Vivienda y la regulación del alquiler, calificándolas de “fracaso” por reducir la oferta y aumentar la inseguridad jurídica. Finalmente, subraya que la inteligencia artificial transformará el sector mediante tasaciones automáticas, análisis predictivos y procesos 100% digitales, consolidando una nueva etapa de profesionalización y sostenibilidad en el mercado inmobiliario español.